jueves, 8 de mayo de 2008

De Zubiri a Pamplona y algo más

Bordeando el Arga y entre pastos y bosques se puede decir que ha trascurrido la jornada. Lo más destacable pudiera ser el barro y los charcos que te hacen agradecer el bordón. Es un paseo entretenido hasta Burlada donde me paro, a las puertas de Pamplona a tomar un refrigerio. Como decía mi compañero y amigo Poblete " Quien no toma una tapa antes de la una...viene el diablo y te la ....". No había ni un bar el todo el recorrido donde tomar un café y no he tenido más remedio que recuperar fuerzas para entrar en Pamplona.
Quien siga ésto con el interés ortodoxo del Camino no entenderá mi paso por esta hermosa ciudad, de la que voy a decir pocas cosas pues no he hecho el recorrido oficial. A quien desee más información de la ciudad le remito a las guias o a la oficina de turismo. Quien os escribe, se permite ciertas licencias y ha cambiado el rumbo y en lugar de ir al centro y a la Estafeta, que por cierto le consta que la zona tiene unos precios en desacuerdo con la cordura, se ha dirigido hacia el Club de Tenis, bien orientado por unos abuelos con boina frente al Seminario y su gran cruz latina.
No he ido a jugar un partido, simplemente tomo esa referencia pues muy cerca está el Asador Olaberri donde me había prometido ir a comer. Me atiende Adolfo, en la barra con enorme simpatía al verme pertrechado de peregrino. Después de un estupéndo tinto navarro Tempranillo, crianza que no abandonaré durante la comida paso al comedor donde me atienden unas camareras agradables y profesionales. Me soportan hasta un par de chistes malos y hasta me hacen de fotógrafas. Espárragos naturales con una vinagreta templada, una previa de chistorra y un feliz chuletón de vaca que merece una llamada a la propietaria ( la vaca), para felicitarla por sus carnes suculentas. Me dicen que no está. Se encuentra ocupada mirando, con el mismo interés, unos trenes al pasar, junto con su homólogo G.W. Bush. Es igual,
ya la felicitaré otro dia. Por no seguir sólo con mis pensamientos ganadero/políticos me vuelvo a la barra para abusar de la compañía y la conversación de Adolfo. Hablamos de restaurantes, de hongos y de futbol. Se unen a la conversación varios parroquianos y con dos pacharanes ya prefiero marchar hacia Cizur Menor a dormir. Unos cinco kilómetros fantásticos por el campus de la Universidad que me hacen rememorar viejos tiempos. No puedo resistir el impulso de tumbarme en una pradera mirando los robles y chopos de mi alrededor. El Albergue de Cizur es acogedor y su hospitalera Maribel no lo es menos. Precioso casón con todos los servicios exceptuando un puerto USB para colar unas fotos de este dia. Mañana quizá.

1 comentario:

PakiMenbrot dijo...

bordón. Conjunto de tres versos, normalmente un pentasílabo y dos heptasílabos, que se añade a una seguidilla.

Hacia Roma caminan
dos peregrinos,
a que los case el Papa
porque son primos.
Sombrerito de hule
lleva el mozuelo,
y la pelegrinita,
de terciopelo.
Al pasar por el puente
de la Victoria
tropezó la madrina,
cayó la novia...
Han llegado a Palacio,
suben arriba,
y en la sala del Papa
los examinan.
Les ha preguntado el Papa
cómo se llaman.
Él le dice que Pedro
y ella que Ana.
Les ha preguntado el Papa
que qué edad tienen.
Ella dice que quince
y él diez y siete.
Les ha preguntado el Papa
de dónde eran.
Ella dice de Cabra
y él de Antequera.
Les ha preguntado el Papa
que si han pecado.
Él le dice que un beso
que le había dado.
Y a la pelegrinita,
que es vergonzosa,
se le ha puesto la cara
como una rosa.
Y ha respondido el Papa
desde su cuarto:
¡Quién fuera pelegrino
para otro tanto!

Las campanas de Roma
ya repicaron
porque los pelegrinos
ya se casaron.